Mexicanas con Esclérosis Múltiple: corren mayor riesgo de sufrir violencia de género
En los días previos al día Internacional de la Mujer, Merck, compañía farmacéutica, convocó a una reunión con especialistas en Esclérosis Múltiple para dar a conocer un panorama general de las acciones que se pueden tomar como sociedad para detectar y tratar una enfermedad que puede afectar la calidad de vida de las mujeres. Un diagnóstico temprano y políticas públicas que garanticen presupuestos para tratar a las pacientes, las alternativas más viables.
6% de la población mexicana tiene alguna limitación física o mental
La Esclerosis Múltiple es una enfermedad crónica, degenerativa, inflamatoria y autoinmune del sistema nervioso central, la cual provoca deterioro neurológico progresivo que afecta la capacidad cognitiva, la vista, el movimiento y el habla de quienes viven con ella.
El rango de edad más común en el que se detecta a un paciente con Esclérosis Múltiple oscila entre los 20 a 40 años y son las mujeres en quienes prevalece con mayor frecuencia esta enfermedad. Se estima que en México, cada vez son más jóvenes las mujeres diagnosticadas en comparación con los hombres.
Al ser una enfermedad que provoca desgaste físico y pérdida de diversas capacidades, las mujeres que lo padecen tienden a quedar desempleadas, lo que las hace más vulnerables ante posibles abusos o violencia de género económica, física o psicológica. Muchas de ellas son abandonadas por su pareja, según reveló en el marco de un evento al respecto que estuvo presidido por la doctora Brenda Bertado, médico especialista en Neurología.
La doctora Bertado detalló, que en México el diagnóstico de un paciente con Esclerosis Múltiple suele ser tardío, debido a que la mayoría de los síntomas se asocian con otro tipo de enfermedades.
Luz María Ramírez, Presidenta de la Federación de Esclérosis Múltiple en México A.C. (FEMMEX) y de la Asociación Unidos Combatiendo la Esclerosis Múltiple A.C. (UCEM), hizo énfasis en la importancia de impulsar políticas públicas que favorezcan el financiamiento de los tratamientos para esta enfermedad, que es crónica y degenerativa, pero puede ser tratada.
“Es fundamental que continuemos escuchando y aprendiendo sobre las necesidades de los pacientes con EM. En la actualidad, la innovación en tratamientos nos permite brindar mejores opciones y que sean cada vez más pacientes que llevan una vida normal y realicen actividades de manera independiente, continúen con su vida profesional y personal”, finalizó la especialista.
