4 de cada 10 mexicanos consideran que el soborno y la corrupción arriesgan el futuro de las empresas
Este 9 de diciembre fue proclamado por la Asamblea General de las Naciones Unidas como el día mundial contra la corrupción. Bajo este tenor, la firma global EY especializada en servicios de auditoría, impuestos, asesoría de negocios, transacciones, fusiones y adquisiciones, da a conocer su reporte de Integridad Global 2020 realizado por la propia firma.
Partiendo de que las empresas exitosas se guían por la integridad, EY propone qué acciones deben cuidar las organizaciones para propiciar la conductas del personal, conductas de terceras partes e integridad de los datos.
Para realizar el reporte de Integridad Global 2020, se hizo una encuesta, en la que cinco de cada 10 empleados Junior reportan no confíar mucho en que la gerencia cumpla con las leyes, códigos de conducta y regulaciones relevantes de la industria, mientras que un 13% de todos los encuestados estaría dispuesto a ignorar la conducta poco ética de terceros para impulsar su carrera o su salario.
Casi un tercio (30%) respondió poder comportarse de manera no ética a fin de mejorar su propio progreso profesional y obtener su paquete de remuneración.
Solo el 34% de los encuestados confía en que sus terceros demuestren integridad en el trabajo que realizan.
El 59% de las organizaciones no capacita a los empleados sobre las normas de privacidad.
La encuesta muestra un sorprendente desajuste entre la forma en que la gerencia y los empleados Junior perciben las acciones de liderazgo y los valores de su organización. Ejemplo de ello es que el 67% de los encuestados a nivel gerencial piensa que la junta frecuentemente habla de la importancia de comportarse con integridad, pero solo el 37% de los empleados Junior piensa lo mismo.
Únicamente el 58% de los empleados Junior está de acuerdo en que los empleados de su organización pueden denunciar irregularidades en el trabajo sin temor a consecuencias negativas para ellos; y el 70% de los miembros de la junta está de acuerdo. Aunado a ello, seis de cada 10 empleados Junior no confían en que sus gerentes demuestren integridad profesional.
¿Qué significa para los mexicanos operar con integridad en una empresa?
Para el 52% de los mexicanos encuestados, la definición más popular fue cumplir con las reglas y regulaciones, mientras que para un 46% consiste en actuar responsablemente con colegas, clientes y proveedores. Mientras que el 39% considera que es hacer lo correcto incluso cuando nadie está observando.
Asimismo, el 41% de los mexicanos considera que el soborno y la corrupción son los principales factores de riesgo para el éxito a largo plazo de las organizaciones, otros factores señalados fueron fraude (30%), tensiones comerciales entre países (28%), ataques cibernéticos (27%) y entorno regulatorio complejo y cambiante (19%), entre otros.
Señala Ignacio Cortés, socio líder de Fraud & Integrity Services de EY Latinoamérica Norte, que las organizaciones deben implementar el modelo de gobernabilidad conocido como “las tres líneas de defensa”: los líderes comerciales deben demostrar integridad en sus decisiones cotidianas y servir de ejemplo. Cumplimiento, diseñar e implementar controles y sistemas que permiten a los demás hacer lo mismo. Y auditoría interna, la cual ofrece integridad
Recomendaciones para analizar si la integridad está siendo implementada:
-Evaluar el marco de cumplimiento actual.
-Investigar las actitudes del personal sobre los riesgos y las presiones para hacer lo incorrecto y fortalecer los canales para que los empleados denuncien de manera confidencial los casos de mala conducta sin temor a represalias.
-Tomar responsabilidad personal de las propias acciones profesionales, ya sean cuestionadas o no. Los empleados superiores deben dar el ejemplo para crear una cultura de integridad.
-Realizar un análisis para conocer la causa principal del mal comportamiento y qué es lo que configura el comportamiento poco ético.
-Desarrollar políticas y procedimientos que influyan en el comportamiento individual en todos los niveles.
-Integración de tecnología digital y automatización para mejorar la eficiencia y la toma de decisiones a lo largo de la incorporación, la evaluación y el monitoreo de terceros.
La integridad es más que una declaración de misión y políticas escritas. Es algo que todos deberían desarrollar, desde el CEO y la junta hasta los empleados Junior, socios comerciales y terceras partes.
