La llegada de Internet, hace ya algunos años, generó un antes y un después en las diferentes civilizaciones, abriendo paso a una nueva manera de comunicación entre usuarios que no necesariamente necesitaban estar dentro de la misma habitación. Por ejemplo, con el correo electrónico, las páginas web o los foros. La interacción entre personas empezó a ganar, poco a poco, más y más fuerza, eliminando -entre otras cosas- gran cantidad de fronteras culturales o idiomáticas.