Transformación de las generaciones en los espacios de trabajo
Los millenials (aquellos nacidos entre 1981 y 1993) son una generación de la cual se ha hablado mucho en el entorno laboral, desde la implementación de estrategias para atraer y retener talento, hasta cómo potenciar su competitividad.
Sin embargo, con la automatización del trabajo, la llegada de la generación Z (nacidos de 1994 a 2010) empujará hacia nuevos niveles la competencia laboral, ya que suelen dominar más de dos idiomas, tienen un amplio conocimiento de la tecnología por haber nacido con ella a su alrededor, así como una gran capacidad para resolver problemas y adaptarse al cambio.
Estos jóvenes trabajadores, junto con la digitalización e inteligencia artificial, impactarán de forma importante para que las organizaciones salten del trabajo tradicional a un modelo innovador y disruptivo. Al respecto, un informe del McKinsey Global Institute encontró que en los próximos años las vacantes no serán necesariamente remplazadas a grande escala por las máquinas, y que hasta el 45% de las actividades que las personas desempeñan en esas posiciones podrían ser automatizadas.
La transformación digital es un elemento que resultará esencial para cualquier empresa; sin embargo, el talento humano seguirá formando parte de los equipos de trabajo, lo cual representará un reto para las áreas de recursos humanos pues será necesario implementar nuevos modelos con base en las necesidades de esta última generación y la cultura organizacional que se genere. De acuerdo con un estudio realizado por Deloitte, alrededor del 80% de los líderes de un negocio consideran la experiencia de los empleados como un factor muy importante para el buen desarrollo de sus actividades.
Los perfiles de trabajo se modificarán y con ello las expectativas del talento; los profesionales recién egresados son capaces de generar ideas innovadoras y representan ocho de cada diez nuevos empleos, según la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE). Las carreras relacionadas con Ciencias Sociales o Humanidades perderán relevancia y los estudiantes optarán por cursar licenciaturas que probablemente en la actualidad ni siquiera existen.
“Los cambios vienen cada vez más fuertes, pero la Calidad de Vida seguirá siendo uno de los pilares más importantes para motivar y retener al talento humano. El futuro laboral será una oportunidad para implementar nuevos programas de bienestar que se adecúen al enfoque de toda la organización, buscando siempre tener una fuerza laboral satisfecha que busque llegar a un resultado en común”
Roxana Aguirre, directora de gestión humana en Sodexo Beneficios e Incentivos México.
La generación Z se siente deseosa de tener nuevos conocimientos que hagan de sus actividades laborales algo innovador y “fuera de la caja”, lo cual es una ventaja sobre los millennials. De acuerdo con el estudio global Talent Trends 2020, el 56% de las compañías a nivel global están creando y actualizando políticas que fortalezcan la relación entre cada grupo etario de su plantilla laboral En conclusión, el talento humano no desaparecerá pero las organizaciones deben tomarse el tiempo de romper estereotipos y crear programas que otorguen compensaciones, beneficios y equilibrios entre el trabajo y la vida personal, así como una cultura positiva, con el objetivo de aprovechar el mayor potencial de cada generación.
