Soluciones arquitectónicas para la salud de los pacientes
La arquitectura y el diseño pueden contribuir en los procesos de sanación de los pacientes de los hospitales.
El año pasado Global Health Intelligence emitió un ranking de los hospitales mejor equipados de América Latina, donde se incluyó a varios hospitales de México (públicos y privados), los cuales resultaron calificados positivamente en cuatro categorías: 1.Hospitales mejor equipados para recibir pacientes; 2. Mejores hospitales para acomodar a recién nacidos, 3.Hospitales con la mayor cantidad de equipos para el diagnóstico por imagen, 4.La mayor concentración en la salud cardiovascular.
En dicho ranking, México figura con10 de los hospitales más grandes, de acuerdo a la capacidad de pacientes en cama que pueden atender: Hospital de la Mujer del Gobierno de la ciudad de México con 961 camas, Hospital General de México (944 camas), Hospital Civil de Guadalajara Fray Antonio Alcalde (924), Hospital Central Militar (792), Centro Médico La Raza del IMSS (740), Hospital Civil de Guadalajara Juan I. Menchaca (693), Hospital Universitario Eleuterio González (682), Hospital Regional 46 del IMSS en Guadalajara y el Hospital de Gineco-Obstetricia 23 del IMSS en Monterrey (584).
Sin embargo, es bien sabido que la dimensión y capacidad de un hospital no es directamente proporcional a el servicio y calidad de atención que pueden recibir los pacientes; puede determinar su capacidad, más no su servicio y eficacia. No obstante, existen recursos que pueden ser utilizados y que contribuirán de cierto modo a brindar mejores servicios e impulsar un mejor progreso de sanación.
¿Arquitectura que ayuda a sanar?
Tanto para hospitales y consultorios privados el factor de bienestar representa una función cada vez más importante. Se ha estudiado que las edificaciones de servicios de salud tienen una contribución activa al proceso de sanación, relajación y revitalización de los pacientes, sin descartar que la arquitectura y el diseño podrían tener la capacidad de impulsar el proceso de sanación a través de estímulos físicos y psicológicos.
La empresa Dormakaba, especializada en soluciones de seguridad y control de acceso, refiere que estos nuevos conocimientos e ideas dan un nuevo impulso a la práctica del diseño de espacios, donde la luz del día reaviva y da motivación, los colores estimulan, y el diseño moderno transmite la impresión de competencia y experiencia.
Dos ejemplos ilustran dicha tendencia: el Hospital Liv Ulus de Estambul, cuyo concepto de diseño implementado en este hospital de Turquía, se alínea a la movilización de fuerzas de autocuración inherente al cuerpo humano. Utilizando operador de puerta corredera ES 400 de Dormakaba.
El segundo ejemplo es el Centro Nacional del Corazón, Singapur (foto), el cual maneja una arquitectura abierta y bañada por la luz, que dirige la mirada hacia el paisaje en el área externa, proporcionando céspedes verdes exuberantes y jardínes colgantes como óasis de tranquilidad para el cuerpo y el alma. Instalaciones en las que Broadway Malyan Architects desarrolló el concepto en colaboración con el Ministerio de Salud, apoyada en asociación arquitectónica Ong & Ong.
Se menciona que los productos de Dormakaba pueden verse en todos los doce pisos del complejo. Puertas automáticas corredizas y de vaivén (ES 200 y ES 200 Easy, ED 200 y ED 250) garantiza el acceso sin barreras, mientras que el sistema de cierre de puertas Dormakaba mantiene el flujo de tráfico en curso. Tener una amplia cartera de productos significa que siempre hay el producto adecuado para la correcta aplicación: ITS 96, TS 92, TS 93, BTS 80. Además de éstos, las paredes móviles (Variflex y MODEO) ofrecen máxima flexibilidad para el uso de los espacios.
Un enfoque holístico adoptado por todos los involucrados en la construcción y el diseño de interiores del edificio es una condición esencial para la arquitectura sostenible.
Desde la planificación de las instalaciones de salud, es esencial tener en cuenta todos los factores que pueden influir en el medio ambiente, tanto natural como creado por el hombre, en que se alojan los pacientes, desde las distorsiones geológicas en las bases locales hasta la radiación electromagnética producida por los exámenes diarios.
