Principales retos de la industria lechera en México
Este 1° de junio se celebra el Día Mundial de la Leche y en México el sector atraviesa dos grandes retos que afrontar. El primero de ellos es tener una mayor promoción para que se incremente el consumo; el segundo, lograr un impacto carbono cero en su producción.
Sobre este último punto, Vicente Gómez Cobo, presidente de la Federación Mexicana de Lechería (FEMELECHE), recordó que el cambio climático afecta a todos como sociedad, desde productores hasta consumidores finales, por lo que es un reto para toda la sociedad. Sin embargo, para afrontar dichos retos, dijo, se necesitan recursos.
"Parte de ese gran reto es que implica un costo, un costo en la forma de vivir, de movernos; la inversión público-privada que se requiere para hacer un cambio es importante. Los cambios no se dan por sí solos, se dan porque viene una acción de la sociedad, del gobierno, y para ello se requieren grandes recursos", expuso Gómez Cobo durante su participación en el Foro Internacional "Importancia Nutricional de la Leche y sus Derivados en la Salud Humana", organizado por la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader).
Agregó que en los países desarrollados se han colocado como meta lograr para el 2030 la meta de carbón cero dentro de la cadena productiva de la leche, y México está rezagado en dicha meta.
"Nosotros como sociedad y gobierno vamos atrás, porque también se vuelve un tema de competitividad (...). Si no hacemos una inversión de recursos, de conocimientos importantes, nos vamos a quedar en un diálogo sin espacios. Como cadena tenemos que lograr estos objetivos y como Gobierno requerimos los apoyos", indicó el presidente de FEMELECHE durante su ponencia.
Por su parte, Ricardo Villavicencio, presidente de la Cámara Nacional de Industriales de la Leche (Canilec), considera que el principal reto del sector es posicionar a la leche y sus derivados como elemento fundamental de la dieta de los mexicanos, y a través de ello aumentar el consumo de este tipo de productos.
Cabe recordar que, de acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y Agricultura (FAO) el consumo mínimo per cápita de leche debería ubicarse en 180 litros anuales, y en México se encuentra por debajo de los 120 litros.
Un mecanismo para impulsar el consumo nacional es una campaña de promoción del consumo genérico de la leche, tal y como ha sucedido en países como Chile, Ecuador, Brasil y España, agregó Villavicencio.
La doctora Teresa Shamah Levy, directora de Área del Centro de Investigación en Evaluación y Encuestas del Instituto Nacional de Salud Pública, comentó durante su participación en el Foro que la leche es una pieza importante dentro de una dieta balanceada para la población mexicana.
Asimismo, destacó la importancia que tiene la leche en la nutrición de los niños y su desarrollo integral, especialmente en el caso de la leche fortificada. Recordó que Liconsa hizo un estudio para ver los efectos de la leche fortificada en niños, y al cabo de dos años el resultado arrojó menores tasas de anemia, déficit de hierro así como caída en la desnutrición crónica.
Por su parte, Francisco Fontecha, investigador del Instituto de Investigación en Ciencias de la Alimentación del Consejo Superior de Investigaciones Científicas del Ministerio de Ciencia e Innovación de España, expuso que hay estudios que indican que el consumo de lácteos se asocia con una menor mortalidad y eventos de los principales eventos cardiovasculares que sufren las personas.