Directivas mexicanas y el Techo de Cristal: ¿Por qué la lucha continúa?
La frase "techo de cristal", acuñada en 1978 por Marilyn Loden, consultora inglesa en temas laborales, es la metáfora que alude a las batallas continuas de las mujeres profesionistas que luchan por erradicar esas barreras ‘invisibles’, pero reales (como las actitudes que toman los varones directivos, los prejuicios, prácticas culturales, las leyes, políticas explícitas) y que persiste 50 años después, bloqueando la oportunidad de ascender a puestos de liderazgo y alta dirección en el ámbito profesional, a pesar de su calificación y méritos.

¿Cómo afecta a las mujeres el techo de cristal?
La relación entre la diversidad de género y el desempeño organizacional está ampliamente demostrada.
El techo de cristal impide que las mujeres alcancen su máximo potencial en sus carreras, lo que resulta en una sub-representación en puestos de alta dirección. Además de que se topan con desafíos como:
-Brecha salarial: Las mujeres que logran superar el techo de cristal a menudo ganan menos que sus colegas masculinos en puestos similares.
Falta de modelos a seguir: La escasez de mujeres en puestos de liderazgo dificulta que las mujeres jóvenes encuentren modelos a seguir y mentores que las inspiren y guíen.
Discriminación y estereotipos: Las mujeres a menudo enfrentan discriminación y estereotipos de género que las consideran menos competentes o menos comprometidas que los hombres.
Dificultad para equilibrar la vida laboral y personal: Las mujeres a menudo asumen una mayor responsabilidad por el cuidado de los niños y las tareas del hogar, lo que dificulta su avance profesional, por citar los de mayor incidencia.
Presencia de mujeres en puestos directivos en México
La presencia de mujeres en puestos directivos en México aún es limitada, aunque ha habido avances en los últimos años, la realidad no ha cambiado mucho. Las cifras demuestran la existencia de ese techo de cristal que impide el avance de las mujeres a los puestos directivos.
Según datos del Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO), en México, solo el 8% de los puestos en los consejos de administración son ocupados por mujeres, y solo un 4% ocupan las direcciones generales de empresas que cotizan en la Bolsa Mexicana de Valores.
Aunque existen iniciativas y organizaciones que trabajan para promover la igualdad de género en el ámbito laboral, y aumentar la participación de las mujeres en puestos de liderazgo en México, el camino de este desafío es largo y persistente.