La pandemia de la COVID-19 cambió el estilo de vida de las personas. Con las recomendaciones de confinamiento, los estudiantes tomaron clases a distancia, algunas compañías optaron por el trabajo remoto, los usuarios consumieron contenido multimedia y utilizaron las redes sociales para estar en contacto con sus seres queridos. Para esas actividades se requiere acceso a Internet y una conexión estable.