Sitios web corporativos: a pesar de los pronósticos, no desaparecieron y son claves para empresas y clientes
Por John David Little, especialista senior de marketing en Progress
Las predicciones de los últimos años en el sector tecnológico incluían siempre cuatro augurios: crecimiento del comercio electrónico, del contenido en las aplicaciones, del uso de dispositivos portátiles, y el fin de las páginas corporativas. Aunque los primeros tres se cumplieron, el último no sucedió: el número de sitios web aumentó en un 250%.
Los expertos hablaban del fin de las experiencias digitales centradas en la web. Estos fueron alguno de los títulos que publicaron medios de comunicación de referencia:
"RIP a sus sitios web corporativos" - CMSWire, 2012.
"La Web está muriendo; las aplicaciones la están matando" - WSJ, 2014.
“Cómo los sitios web tradicionales podrían volverse obsoletos para 2020” - Website Magazine, 2015.
Estos títulos ya no aparecen en los medios. Investigando en la cobertura del tema, los artículos que predicen el final de los sitios online se detuvieron hace unos tres años. Las páginas web deberían declarar, como Mark Twain: "Los informes sobre mi muerte son muy exagerados".
¿Qué falló en las predicciones que decían que las aplicaciones dominarían el marketing y el comercio electrónico? Todos esos artículos mencionados -y la infinidad de posteos de blogs sobre el tema- se alinearon detrás de algunos supuestos, que sonaban lógicos en aquel momento:
-Google Knowledge Graph: esta herramienta permite ver el contenido principal de un tema desde el buscador, sin necesidad de entrar al sitio. Es posible que nunca más necesite salir de su motor de búsqueda, decían los augurios.
-Los motores de búsqueda nos ayudaron a confiar en bases de datos y aplicaciones de terceros para obtener información: si el perfil de Yelp o Guía Óleo de un restaurante popular ocupa un lugar más alto que el sitio web del restaurante en una búsqueda, es más fácil hacer clic en el enlace de ese sitio de referencia. Esa es una experiencia habitual. También es común la idea de que el contenido generado por el usuario, en forma de reseñas y calificaciones de los clientes, es una fuente de información más confiable que un sitio web de marca.
-El comercio se estaba alejando de los sitios web corporativos. Para muchos, nuestras experiencias digitales se alojarían en Amazon, MercadoLibre o en otro lugar del e-commerce.
-Las aplicaciones móviles iban a hacer que el sitio web fuera obsoleto: este fue probablemente el golpe de gracia más fuerte. El uso de los dispositivos móviles se estaba disparando y los consumidores de contenido preferirían la velocidad y las capacidades que ofrecían las aplicaciones sin conexión.
La realidad es que la mayoría de estas razones se materializaron de una forma u otra, con excepción de las aplicaciones: no se utilizan tanto como se predijo. Pero las webs se mantuvieron.
Se estima que en la actualidad existen 1.800 millones de sitios, en comparación con los 700 millones de 2012. La cantidad de páginas activas fluctúa y la mayoría está inactiva en un momento dado, pero redondeando en porcentajes grandes, eso representa un aumento de más del 250% desde que comenzaron las predicciones del fin de los tiempos para la web. ¿Por qué? Estas son algunas de las ideas que podrían ayudar a explicar la inesperada supervivencia de los sitios web:
-El CMS mejoró, al igual que los sitios múltiples. La gestión de contenido es mejor y también lo son las experiencias: el vídeo, el audio y otros contenidos enriquecidos llegaron a los sitios web corporativos, y los especialistas en marketing y los usuarios corporativos recibieron herramientas para utilizarlos de forma eficaz.
-El diseño escalable se hizo más fácil y más común, por lo que las aplicaciones no eran tan necesarias (o tan interesantes). CMS, DMS, DAM y otras capacidades de integración y de sitios múltiples condujeron naturalmente a experiencias de intranet y portal que se volvieron esenciales para trabajar en la era digital.
-Las aplicaciones se usan de manera diferente a lo esperado: encontraron su nicho. La fotografía, la música, las redes sociales, la salud, el estilo de vida, los servicios públicos y los juegos (no los negocios) se convirtieron en los modos de uso más habituales. Al mismo tiempo, el acceso a Internet se ha vuelto casi omnipresente, lo que hace que los navegadores en dispositivos móviles sean más útiles. A medida que surgen más PWA (aplicaciones web progresivas), se multiplican los rumores sobre el fin de las tiendas de aplicaciones.
-En alguna medida, las tablets reemplazaron a las computadoras portátiles: las pantallas táctiles permiten que las computadoras portátiles actúen como tabletas y teléfonos y ya no es tan necesario llevar varios dispositivos. Además, a medida que más de nosotros trabajamos de forma remota y confiamos en la videotelefonía y el chat en línea para las comunicaciones de audio, ¿qué hace ese teléfono, excepto distraerme durante las conferencias telefónicas?
Una razón más: creo que simplemente nos gustan los sitios web. Son familiares, flexibles, personalizados y fáciles de navegar. Siguen siendo el principal punto de contacto para nuestros clientes, nuestro lugar para contar nuestra historia, y son la base de operaciones a la que apuntan nuestros otros canales.